Este tema es algo recurrente en Internet, porque muchos ven aun el internet como la tierra sin ley donde todo se puede conseguir gratis sin que traiga ninguna consecuencia negativa. Existen muchos servicios que ofrecen Páginas Web Gratuitas, y entonces viene la pregunta ¿Si la puedo obtener gratis, para qué voy a pagar?.
Hagamos un ejercicio mental, e imaginemos que vamos caminando por la calle y vemos un local que dice «Local Gratis Llame a este número..» Llamamos y efectivamente el local es gratis pero tiene unas condiciones:
Sólo puedes usar el local 2 horas al día, tienes que permitir colocar el banner publicitario del dueño del local en la entrada, y en la puerta debe estar una asesora de ventas del negocio del dueño del local ofreciendo sus productos. ¿Es rentable para tu negocio? ¿Cuanta gente entrará a tu local por tu negocio? ¿Acaso no entrarán porque la valla publicitaria anuncia la de tu arrendador? Y es que si por casualidad alguien entra a tu local por tus ofertas se verá agobiado por la insistencia de la oferta de los productos de tu arrendador. Al final el dicho se hace verdadero «Lo barato sale caro».
Tienes un sitio gratis pero al final es como si no tuvieras nada, porque no generas confianza en tus visitantes, por eso para un empresa que comienza es bueno hacer una pequeña inversión y luego poco a poco ir aumentando la calidad de la Página Web pero de algo si estamos seguros, una página gratis es un espejismo.